ViriAOR no será el que los defienda ni el que los critique, ya que, tanto en la primera época, la que les hizo grandes y únicos en esto del Rock Melódico, en la segunda, y la más duradera, con sonidos más modernos o más cercanos al Pop, Pop Rock o como queramos llamarlo, y que podía acercarse a la música que les gustaba hacer y con lo que sentían felices, como en la tercera, en la que estamos, y podríamos llamarla Generación Mood Swings, ya que hubo reunión para celebrar el vigésimo aniversario del disco que les hizo íconos de la melodía, hay temas realmente buenos y que hace de ellos, polémicas aparte, una de las bandas de referencia.
Por todo ello, y cuando se te pone delante de tus narices, y de tus orejas, un nuevo disco de los canadienses, es inevitable que esa incertidumbre de duda, por ver qué se les ha ocurrido en esta ocasión, y de miedo, por ver si vas a tener que llevarte las manos a la cabeza.
Y dicho ésto, ¿de qué época de Harem Scarem eres?. Si eres de la primera o de la tercera, estás de enhorabuena, *United*, la «excusa» por la que hablamos de ellos, y que saldrá el próximo *12 de mayo de 2017*, está lleno de *melodías, guitarras, coros, estribillos* y todo aquello por lo que «quieres» a los canadienses. Eso sí, tampoco te emociones porque aquél primer disco homónimo al grupo, o el gran Mood Swings, siguen a años luz. Algo normal, superar esos discos se me antoja misión imposible.
Aún así, *United*, que está hecho por la formación habitual: los líderes *Harry Hess*, voz y guitarra, *Pete Lesperance*, guitarras, *Stan Miczek*, bajo, *Creighton Doane*, batería, y el divertido *Darren Smith*, a los coros, es un disco que merece la pena y que te mantendrá agarrado al reproductor, cantando, sí, cantando, todo lo que dura, y alucinando con las guitarras, sobre todo las rítmicas, del mostro Pete Lesperance.
El tema *United* abre el disco, y tras una especie de intro, con timbales y guitarras, comienza a sonar el riff, que se rompe con la melodía y golpes de bombo para acabar después en el primer estribillo, que es Harem Scarem por todos lados, voces, coros y guitarras de la vieja escuela. ¡Bravo!
*Here Today Gone Tomorrow* empieza con el sonido de guitarra tan característico e inimitable de los canadienses, con solo oírlo se sabe que son ellos. Ese riff estará durante toda la canción, un poco por debajo, y algo distinto, durante las estrofas, y bien alto después de los estribillos, que como no puede ser de otra manera, son factoria Harem Scarem.
*Gravity* es el tercer tema, con un rollo vacilón en las guitarras y en los coros. El solo, muy bueno. Del estribillo no voy a decir nada.
*Sinking Ship*. Como se diría en el argot informático, copia y pega de cualquier canción que se te ocurra de ellos, melodías, coros y unas guitarras súper trabajadas y maravillosas. ¿Qué tiene de diferente?, que en el estribillo final, los metales de la batería son igual de protagonistas que los coros, dotándole a éstos de un sonido más «duro».
*One Of Life’s Mysteries*. Medio tiempo, con teclados y todo, muy tierna en las estrofas y la fuerza Harem Scarem en los estribillos. Sí, sé que aburro con lo de los estribillos, pero es que es así, hacedme caso.
*No Regrets*. Aires indios al comienzo para enlazar con la vuelta a la velocidad y a las guitarras únicas de Lesperance. El puente hacia el estribillo, y el solo, dos en uno, (cuando lo escuchéis, me diréis) me parecen brutales. El mejor tema del disco, sin duda.
*Bite The Bullet*. Que alguien me diga que la tercera voz que hay en los coros al final de la canción, y que es lo que la hace distinta al resto, no todo es coral, no es Jeff Scott Soto. ¡Cómo se me parece, y no es la primera vez que me ocurre!
*Things I Know*. En esta ocasión me quedo con las baterías durante las estrofas, que hacen que la canción tenga otro ritmo, más lento, para acabar, ¿en qué?, pues en más coros y estribillos «coreables» y «cantables» cien por cien.
*The Sky Is Falling*. Batería machacona a ritmo, rápido, toda la canción y acompañada, también con ritmo marcado, por la guitarra.
*Heaven And Earth*. Un trabajo de guitarras maravillosos, el riff está toda la canción ahí presente. También está bien el bajo.
*Indestructible*, la última del disco, tiene un comienzo, quizás un poco largo, de guitarra acústica, con un rollo vaquero, y voz, con un coro por debajo, que se rompe con un ritmo y guitarras rápidas. El puente hacia el solo de guitarra es maravilloso.
Lo dicho, la *Generación Mood Swings* sigue viva, larga vida a la melodía, a los coros, y a estos tíos raros, y con ese humor, de Harem Scarem. 7´5
una maravilla de disco, de lo mejor del año seguro
Coincido contigo.